Post-verdad y post-política en el Centro Direccional
30 de juliol de 2019 a les 12:43El pasado 26 de julio se aprobó en el Consorcio del Centro Direccional el Plan Director Urbanístico para urbanizar el "Parc de l'Alba" o "Plana del Castell". Se aprobó un planeamiento heredero (segú su propio texto) de los ya aprobados previamente y anulados por la justicia.
No voy a ponerme a detallar porque el plan es el mismo desastre que los anteriores, porque ni tan solo se aprueba en el Ayuntamiento, porque es inviable ni todos los motivos que existen para oponerse al mismo por dos motivos: Uno es que ya lo he hecho (y otras personas también) decenas de veces desde muchos años y no hay nada nuevo que decir, es lo mismo. La otra es que me han explicado los grandes estrategas de la izquierda en Cerdanyola que "eso no le interesa a nadie". No pretendo, pues, aburrir hablando de mi libro.
El día antes de aprobar el planeamiento se votó en el pleno municipal una moción para (se supone) tratar de recuperar la competencias sobre el Centro Direccional. Sin recorrido jurídico y sin tiempo para nada. Sobre esto sí que hay algo nuevo que decir.
Los impulsores de la moción son ERC y Guanyem. ERC en Cerdanyola ha mantenido estos últimos años una oposición tímida al planeamiento mientras que ERC en la Generalitat era favorable. Guanyem (antes Compromís) ha sido justamente quien ha negociado y acordado este planeamiento con la Generalitat en el Consorcio. El planeamiento aprobado el día 26 es el del gobierno del CxC. Aún cuando me consta que pactado a espaldas de la asamblea del CxC y de miembros del mismo gobierno del CxC. Pero eso, obviamente, es culpa de ellos, por permitirlo. Además el PDU ha sido convenientemente blanqueado con un fantasmagórico proceso participativo.
El elemento nuevo es que Guanyem pretenda, ahora que está en la oposición, hacer ver que se opone a su propio planeamiento. Simplemente hay que enmarcar esta jugada en esta nueva política basada en las 'fake' y la post-verdad. Vamos, a la mentira descarada de toda la vida. Tampoco es nuevo, ya en los debates de la campaña electoral algunos candidatos nos dimos cuenta y comentamos que el único candidato que mentía deliberadamente en temas concretos era el de Guanyem. Lo llaman la batalla del relato y esas cosas.
No deberíamos sorprendernos, este tipo de política lleva tiempo entre nosotros, lo mismo hay un proceso de independencia de la Ley a la Ley y con apoyos internacionales en 18 meses que hay una rebelión y hasta un golpe de estado que nadie hemos visto por ninguna parte. O una negociación para un gobierno progresista en Madrid que consistía en ver quien era el culpable de que no saliera. Le debemos, pues, a Guanyem el haber traído este avance tecno-político a nuestra ciudad.
Por mi parte, no obstante, no pienso apuntarme a estas innovaciones, tengo problemas con las nuevas tecnologías, me gustan las cosas de antes y -hasta ahora- yo veo que los beneficiarios finales de esta post-política son tipos como Salvini, Donald Trump o Albert Rivera ¿Qué puede salir mal?
Jordi Haro